El civil y los brillos

"Viste que a veces ves cosas de otros y pensás woooowww.Y de repente mirás para atrás y te pasaron cosas que otros vieron y pensaron wooowww. Y vos ni cuenta te diste."

De acá.

Mis mejores amigos se casaron. No hay palabras que alcancen para explicar la emoción. Fui testigo. Dije unas palabras. Firmé. No lloré (gran mérito). Fue un honor haberlos acompañado a lo largo de todo este camino y transitar de la mano su conversión a una familia. Muy loco, divertido, especial. Me parece que fueron ayer nuestras charlas y preguntas retóricas al mejor estilo ¿será él amor de mi vida? ¿no soy muy jóven? ¿El Amor es esto? entre tantas otras.
Hubieron uno o dos momentos en donde sentí que el tiempo se frenaba y por un rato pensaba en mí, dejaba de festejar, de estar centrada en ellos y reflexionaba que 6 meses atrás La Novia podría haber sido yo. Con el pibe que ahora está en el fondo del jardín jugando con mi hija. Las vueltas de la vida. No me arrepiento de nada. Qué bueno que sigo soltera. Me aplaudo por mis elecciones. Me las banco. Hay días que me cuestan (mucho) pero me las banco.
Esos pequeños (porque no duraron mucho) momentos funcionaron como paréntesis en lo que fue una gran noche. Gran Noche. Me hicieron bien. Para ser honesta me descolocaron un poco pero sin embargo los viví con dejo de alegría porque si bien no eran *happy thoughts* me hicieron sentir en eje. Tengo la satisfacción de sentir/procesar/pensar las cosas en su justo momento, cuando (a mi entender) tienen su sensato sentido de la existencia. No hay fichas que tengan que caer después. Ahí, ao vivo, experimenté todas esas cosas raras y por ahí no muy felices, lo solté y volví a sonreír.
Vinieron a hacerme compañía, me hicieron sentir especial y me dijeron piropos pormi outfit, por mi flamante "nuevo look". Comieron torta conmigo, me hicieron reír, me compartieron cigarrillos, me bailaron, me dejaron que les baile y al final de la noche me acompañaron a la casa de otros amigos a seguir charlando, chupando y riendo.
No hizo demasiado calor ni frío. No hubieron muchos mosquitos ni gente apelmazada. Todos de fiesta. Fue perfecto. Como les dije ese día a ellos "todos tenemos puestas las fichas acá, no dudo que va a ser "para toda la vida" Es un placer compartir este y todos los momentos con ustedes. Los adoro". Y lo sostengo, claro.
Volviendo a la reflexión de arriba de todo. Cuando estaba sentada en mi sillita de testigo ahí adelante de todo, adentro mío no paraba de repetirme "woooowww" on the loop "esto de verdad está pasando", "se casan posta", "acaban de decir sí quiero", "esto es un flash" y afines que todo se resume en "wooow" yet again. Y pensar que en varios momentos de mi vida otros dijeron "wooow" de mí y yo ni enterada.
Ay El Amor. Y pensar que todavía falta lo mejor.